Informe sobre el proyecto de ley de presupuesto 2018
(IEC-CONADU / Foto de Portada: Gabriela Manzo)
El Instituto de Estudios y Capacitación de CONADU (IEC-CONADU) elaboró un nuevo informe crítico sobre el Proyecto de Ley de Presupuesto 2018, elevado al Congreso por el Gobierno Nacional, con el análisis de los aspectos macroeconómicos, presupuestarios, normativos y específicos del ámbito universitario. Entre los datos se destaca la continuidad y profundización del proceso de reducción del gasto social y de desfinanciamiento del sistema universitario público.
Según Carlos De Feo, Secretario General de CONADU, el Proyecto de Ley de Presupuesto 2018 confirma la política de ajuste y de achicamiento tanto de la universidad como del sistema científico y tecnológico:
“Se reduce el presupuesto en forma nominal pero también real, porque está prevista una inflación que, a todas luces, va a ser mayor a la que anunció el gobierno. Eso va a generar un desfinanciamiento del sistema universitario, afectando áreas que tienen que ver con la articulación de la universidad con el territorio, la caída de programas y el desarrollo de nuevas carreras o de las creadas recientemente. Por otro lado, puesto en contexto, este ajuste afecta centralmente una premisa fundamental que es el derecho a la universidad para los jóvenes —que hoy ven limitadas sus posibilidades de ingreso— y para el conjunto de la sociedad de beneficiarse con el conocimiento que se produce en las universidades”.
El Informe del IEC-CONADU señala que el retroceso del porcentaje del PBI destinado a las universidades públicas —que ya en 2016 había descendido del 0.87% al 0,81%, y llega en 2017 al 0,77%— implica un ajuste real del -11% con respecto al año 2015. Estos números confirman que la estrategia de Cambiemos es producir un ajuste sobre el gasto educativo a través de la licuación que produce adecuar salarios y otros gastos en base a una pauta estimada por debajo de la inflación real.
Con respecto a los salarios docentes, se anuncia un incremento nominal de 30,1%. Sin embargo, al compararlo con la proyección del gasto final en salarios docentes para 2017 este porcentaje se reduce a un 16%. Y si, además, se toma en cuenta el impacto pleno de la paritaria acordada en 2017 en el presupuesto 2018 sólo quedaría disponible un 4,5%.
Por otro lado, el congelamiento de la planta docente se consolida con la imposibilidad efectiva de reemplazar docentes o incorporar a nuevos en carreras en expansión, salvo autorización de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU). Y se sostiene la reticencia del gobierno a activar la cláusula 8 del acta paritaria 2017 para regularizar docentes contratados y ad honorem.
El Informe sobre el Proyecto de Presupuesto 2018 del IEC-CONADU también detalla la reducción prevista en el Fondo Universitario para el Desarrollo Regional (FUNDAR), fundamental para el funcionamiento de las universidades: 15,9% menos en términos nominales y 30% menos de presupuesto en términos reales con respecto a 2017.
En la misma línea se incluye la nueva actividad denominada Otorgamiento de Becas Educativas Argentina Beca (AR-BEC). Su presupuesto total para 2018 de $974,7 millones supone que los fondos destinados a financiar becas a estudiantes disminuyan un 32% en términos nominales y un 44% en términos reales. Igualmente, pueden señalarse caídas en los porcentajes previstos para Gastos de Funcionamiento, para Hospitales Universitarios y para Proyectos Especiales.
Por último, la novedad del Proyecto de Ley de Presupuesto 2018 presentado por el gobierno de Mauricio Macri es la inclusión de partidas para infraestructura universitaria —que hasta este año se asignaban al Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda— por aproximadamente $3.500 millones, financiadas casi en su totalidad con créditos internacionales.