(Por Laura X. Iturbide*) La Organización de Estados Americanos (OEA) agrupa a los treinta y cinco estados americanos y, a través de diversas agencias institucionales[1], es veedor internacional en los distintos aspectos para el desarrollo y la paz en el continente. Sin embargo, como en cualquier actor político, se visibilizan sus preferencias partidarias respecto a los gobiernos de países que, en épocas de derechas y neoliberalismos, son atacados y desprestigiados por la mayoría de los organismos internacionales.
Bajo el argumento de la defensa de la democracia, Luis Almagro Lemes, Secretario General de la OEA, en una declarada y explícita diferencia con el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, hace carne los reclamos de la oposición venezolana mundializando una campaña de agresión contra las instituciones bolivarianas. Lo que sería imposible de llevar adelante sin orquesta afinadísima de medios de comunicación masivos que no saben de fronteras, menos aún de soberanía.
Entre mediados de marzo y los primeros días de abril de 2017 emitió catorce conferencias de prensa[2] dirigidas a minar la imagen democrática de la República Bolivariana de Venezuela ante el mundo, casualmente en vísperas de las elecciones ecuatorianas que definían la continuidad o el quiebre del populismo en ese país.
El enfrentamiento entre el Presidente Maduro y el Secretario General de la OEA no es novedad. Salta a la agenda internacional en mayo de 2016 cuando Luis Almagro Lemes instó a países miembro a aplicar una herramienta del organismo denominada Carta Democrática Interamericana, la cual suspende de la OEA al estado miembro que no cumpla con la condición democrática, hasta tanto regularice su régimen.
Artículo 20° – En caso de que en un Estado Miembro se produzca una alteración del orden constitucional que afecte gravemente su orden democrático, cualquier Estado Miembro o el Secretario General podrá solicitar la convocatoria inmediata del Consejo Permanente para realizar una apreciación colectiva de la situación y adoptar las decisiones que estime conveniente[3].
Los argumentos para denunciar el componente democrático de la Venezuela Bolivariana son diversos para el Secretario de la OEA. En ocasiones cuestiones económicas como la inflación, deuda externa y el desabastecimiento de bienes y, en otros momentos, reivindicando los reclamos de la oposición al gobierno de Maduro, aquella que supo llevar adelante un golpe cívico militar un 11 de abril 2002 y que la sociedad pudo sofocar en restablecimiento de su democracia.
Observamos la filiación partidaria de Luis Almagro en su informe más actualizado, en el cual se refiere directamente a la consolidación de un nuevo gobierno en el país caribeño:
“Para ello sólo será necesario que su próximo Gobierno vuelva a compartir los valores en común que son condición imprescindible para pertenecer a la Organización. Al proponer al Consejo Permanente que considere la decisión de la suspensión lo hago poniendo por delante los principios y el valor superior de las víctimas, encarnadas en el pueblo venezolano.”[4]
Es importante recordar que los Estados parte, aquellas unidades que componen esencialmente a los organismos internacionales, disponen de soberanía y autodeterminación, es decir que adhieren a las buenas prácticas acordadas internacionalmente pero resuelven sus conflictos domésticos en el interior de sus fronteras.
“Luis Almagro es una amenaza a la paz de nuestros pueblos. Promueve la violencia para la intervención militar de EEUU en Latinoamérica”[5], sostuvo recientemente Evo Morales Ayma, Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, luego de que la OEA convocara a una sesión de facto- sin la participación de este país que cumple funciones como miembro permanente del Consejo-.
Cualquier intromisión, que no cuente con el permiso del gobierno electo democráticamente -como es el gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela-, responde a una vulnerabilidad de la soberanía de todos los pueblos americanos.
En la América total, esa completa de norte a sur, lamentablemente se vulneran distintos derechos políticos, sociales y humanos. Por mencionar los más visibles:
– EEUU: el nuevo Gobierno agrede, al menos, a la mitad de la población en sus políticas y discursos.
– México: asesinan y desaparecen centenares de activistas, dirigentes, militantes y periodistas cada año sin una sola reacción estatal.
– Colombia: la violencia y la desigualdad comenzaron a discutirse con la firma de la paz pero continúan los asesinatos a políticos y dirigentes sociales, todo ello acompañado con políticas económicas excluyentes
– Brasil: la Asamblea Nacional expulsó a la Presidenta electa por una acusación sin condena y mantiene un gobierno ilegítimo que deteriora cada año la economía en desmedro de las bases populares (no está de más mencionar que, Eduardo Cunha, principal instigador del juicio político a Dilma Roussef, fuera condenado hace unos días a quince años de prisión por corrupción en el caso Lava Jato).
– Argentina: desde diciembre de 2015 existen personas presas de su libertad por denuncias de contravenciones sin condenas, se ha aumentado su deuda externa y se ha disparado la desocupación.
La OEA entiende que la democracia es el único régimen viable, encomendándose la defensa de las instituciones democráticas y denunciando las injusticias, humanas y sociales de toda la comunidad americana. En ciertos casos, sus Comisiones y Consejos, han sido de gran importancia para visibilizar problemáticas en los estados americanos, sin embargo denunciar y promover la sanción de la calidad democrática de un gobierno electo por el pueblo, es una herramienta peligrosa que sienta precedente en atacar modelos políticos y económicos no alineados a las potencias hegemónicas en tiempos de derecha y neoliberalismo en la región.
* Politóloga y docente UNRN
[1] Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Comité Jurídico Interamericano, Secretarías y Consejos.
[2] http://www.oas.org/es/centro_noticias/comunicados_prensa.asp
[3] Carta Democrática Interamericana http://www.oas.org/OASpage/esp/Documentos/Carta_Democratica.htm
[4] Informe presentado en Marzo de 2017 por el Secretario General de la OEA http://www.oas.org/documents/spa/press/Informe-VZ-Spanish-signed-final.pdf
[5] http://www.telesurtv.net/news/Luis-Almagro-es-una-amenaza-para-la-paz-de-A.-Latina-dice-Bolivia-20170405-0040.html
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