Postales de un hecho fundante para el movimiento obrero de cara a una etapa que asoma en resistencia. Los despidos, el ajuste y las transferencia de recursos a los sectores dominantes puestos en el centro de la escena por trabajadores que se niegan a retroceder. Algunos prefieren mirar otro canal, como el Jefe de Gabinete: Marcos Peña.
Juan Carlos Schmid encabeza la columna de Dragado y Balizamiento, que entra junto a la de ATE, por calle Paseo Colón, hacia el Monumento a los Trabajadores. El líder gremial que minutos más tarde leerá desde palco el documento consensuado para más de 350.000 trabajadores, ahora es uno más sobre el asfalto. Viste un saco verde plomo, pantalones marrones y rostro afeitado, lleva en su mano izquierda una especie de botinero marrón oscuro. Uno de los nombres que más suenan para unificar la CGT el próximo 22 de Agosto, es ahora un hombre sencillo que mira en reiteradas ocasiones el cordón de seguridad de ATE y da pequeñas órdenes para avanzar sólo con gestos. En sólo 59 segundos, Schmid habla de todo.
-¿Qué significa que las 5 centrales estén hoy presentes en el Día del Trabajo?
-Significa que tenemos unidad en la acción y la plena vigencia de los reclamos sindicales que ha levantado esta mesa.
-Uno de los problemas más importantes es la inflación. ¿Qué respuesta hay desde el movimiento obrero?
-La inflación es un problema central, junto con la caída de los niveles de empleo que han motivado esta protesta.
-¿Por qué se va reunificar la CGT el próximo 22 de Agosto?
-La CGT se reunifica para ratificar el reclamo de esta agenda y fundamentalmente para que tengamos una sola voz en el movimiento sindical.
-Macri volvió a anunciar que va a vetar la ley antidespidos. ¿Qué piensan?
-El gobierno tiene todas las facultades para vetar la ley antidespidos, pero también para cargar con el costo político que eso significa.
Antes de terminar la última respuesta, Schmid esquiva con lo justo una pila de banderas con mástiles de tacuara que se salen de la caja de una camioneta de fletes. Va caminando muy rápido, por la hora, pero también por la tropa de trabajadores jóvenes que le pisa los talones.
ATE Capital, bordea el barrio de San Telmo y se pierde entre la marea de gremios y centrales que desde muy temprano llega en banda desde los cuatro puntos cardinales.
Audio: Juan Carlos Shmid
La corneta de Cristina
Eduardo Sosa integra el grupo de barrenderos de “Godoy Cruz, Palermo”, y llevó a la marca un invento que pone nuevamente en los primeros planos del mundo, la inventiva argenta. Se trata de un triciclo de gran tamaño que sobre el parabrisas tiene una botonera desde donde se disparan 12 sonidos distintos de bocinas. “Esto funciona con dos tubos de gas y una batería que están conectados al circuito. Se gasta, obvio, pero es para meterle color a la movida, y ruido”, dice el laburante orgulloso.
El equipo de mística, se completa con Héctor y Ramón, también trabajadores de la misma repartición, que ofician como ayudantes y también creadores del “Tata Móvil”. “Esta bocina, es la bocina de Cristina”, dice Hector y pulsa uno de los botones. Se refiere al recordado acto en 3 de Febrero, el 14 de Mayo de 2008, cuando Néstor asumió la presidencia del PJ, y su compañera ante el sonar de las bocinas expetó: “Por favor, los de la corneta que dejen hablar”. “En ese tiempo estábamos juntos con la señora”, cierra el afiliado al gremio de camioneros.
Los símbolos del movimiento obrero se amontonan, aunque no se superponen, en el frente del carromato: 3 fotos de Evita, 2 logos de la CGT, 2 escudos del PJ, 3 de clubes de fútbol: Huracán, Independiente y San Lorenzo y 1 de las Islas Malvinas impreso sobre una bandera argentina.
CTA: Vienen marchando
En Paseo Colón y San Juan se juntan las banderas blancas y azules de las dos CTA, la de “los trabajadores” y la “autónoma“. “Vamos a marchar juntos“, anuncia un militante y señala las dos banderas que están al revés y sobre el asfalto. Más adelante, un pasacalles que ocupa casi toda la ancha avenida con un grito urgente: “Basta de despidos“, frase que es acompañada por los logos de las centrales.
Se arma un tumulto, y se prende las cámaras. Llega Hugo Yasky y Roberto “Roby” Baradel, que sólo saludan y avisan que se van para el palco porque “tenemos comprometida una participación con la prensa”. El líder de los docentes de la provincia de Buenos Aires, se saca un par de fotos con un grupo de maestras y luego habla a la carrera: “Es un hecho histórico, a un poco más de 3 meses de haber asumido un gobierno que empieza a aplicar planes de ajuste, el movimiento obrero le da una respuesta contundente como la de hoy. Movilización contra los despidos, la criminalización de la protesta, la inflación, y creo que va a haber un antes y después luego de esto. Tenemos que estar a la altura de las circunstancias, por supuesto, para darle continuidad a esta unidad en la acción. Si (Macri) llega a vetar la ley hay que dar una respuesta contundente, yo creo que tendríamos que convocar a un paro general de toda las centrales”.
Audio: Roberto Baradel
Pablo Micheli llega sólo con un chaleco azul y de anteojos oscuros. Tiene la voz más afónica que lo habitual: “En un momento donde se habla de tanta grieta en el país, que nos hayamos puesto de acuerdo es un salto cualitativo, y además dejar de lado las diferencias que tenemos para poner por encima los problemas que tienen los trabajadores con este ajuste tremendo que se esta descargando con este gobierno de derecha”.
Audio: Pablo Micheli
La otra unidad: las orgas sociales y los gremios
Ariel Gutierrez entra por calle Independencia casi corriendo, se acerca a las vallas- custodiadas por “organización CGT” y por un grupo de camioneros- y despliega una bandera blanca que en letras dice: “El Norte también existe. Ni un paso atrás”. Cuenta que vino de la ciudad de Embarcación, Salta, y que trabaja en un Hospital, y al toque dice “que está situación no da para más”, está acelerado y también dolido, aunque con esperanza: “me hice 2.000 kilómetros para venir, imaginate sino voy a querer la unidad de la clase trabajadora, para que se frene todo esto”. También expresa que milita en su provincia con “las Madres“.
Antes de que los invitados y los líderes sindicales comiencen a copar las gradas del escenario, Abel Frutos, líder panadero, que oficia de vocero de la CGT, volvió a repetir e insistir con un vieja construcción semántica que atomiza y aísla al movimiento obrero: “este es un acto que hacemos los trabajadores, no los movimientos sociales”, tiró en la previa parado sobre el filo de la entrada al garage de la sede de Azopardo 871. Horas más tarde, será desautorizado por Hugo Moyano, quien se corrió de ese discurso al pronunciar que “lo importante es que los que queremos defender los derechos de los trabajadores estemos todos juntos”. Y celebró la presencia de dirigentes políticos y sociales en la marcha.
Audio: Abel Frutos
Desde los zócalos de los canales de TV y también en los comentarios de los programas de radio se puntualizó acerca de “las rivalidades históricas de los gremios”, que podrían desencadenar una batalla de proporciones importantes, aunque una ordenada organización de las columnas dejo de lado todo tipo de pleitos y escaramuzas, cuestión que no volvió a ser tomada por el periodismo tras la finalización del histórico acto.
Unidad en la acción
Cerca de las 18, se habilita el tránsito por Paseo Colón y un taxi avanza pisando un colchón de botellas plásticas, y cuando aún no fueron retiradas la totalidad de las vallas que separaron los gremios en tres grandes grupos: por Independencia ingresó la marea verde de camioneros, por el lado de la Rosada: la UOM y la UOCRA y desde el lado de Constitución: la CTA y las orgas sociales.
Las 14 figuras del Monumento al Canto al Trabajo siguen arrastrando la gran roca que ni la “fusiladora” pudo tirar. Desde ese lugar, en diagonal puede leerse la frase de Juan Domingo Perón que acompañó todo el acto: “La unidad nos da la fuerza, la solidaridad la cohesión”.
2 Comentarios Agrega el tuyo