Emprender una aventura por tierra a través de los Estados Unidos es más fácil de lo que la mayoría de la gente piensa. Los vehículos de serie con tracción en las cuatro ruedas son más capaces que nunca; Las rutas y mapas de GPS están disponibles en línea; Las carpas de techo para automóviles hacen que las noches sean más cómodas que nunca. Lo hace tan fácil que incluso podrías pensar en llevar a toda tu familia contigo mientras intentas un viaje de 3,500 millas a lo largo de la división continental desde México hasta Canadá. Que es exactamente lo que hizo el fotógrafo Olivier de Vaulx.
La Vía Láctea parece tan cercana que es casi irreal. Incluso las imágenes generadas por computadora más avanzadas no podrían acercarse a la complejidad de la noche estrellada sobre nuestras cabezas.
Estábamos en Nuevo México, en la primera noche de nuestro viaje a la División Continental, recostados en el cómodo colchón de nuestras carpas en el techo y disfrutando de un espectáculo que ningún cine podrá brindar. Solo han pasado unas pocas horas desde que comenzamos en la frontera entre los EE. UU. y México en el puerto de entrada de Antelope Wells, pero ya nos sentimos a miles de kilómetros de nuestra vida real.
Mis dos hijos adolescentes no recibieron servicio celular en todo el día y nunca se quejaron. En cambio, condujeron nuestras dos camionetas Ford Ranger FX4 a través de la tierra roja del interior de Nuevo México, que es más divertido que cualquier videojuego. Cuando terminó el día, la aventura ya se sentía como un éxito. Pero todavía quedaban 3.500 millas por recorrer.
Calentando en Nuevo México
Kevin Glassett, ávido motociclista e ingeniero retirado de Hewlett-Packard, elaboró una ruta de conducción diaria para nuestro GPS, con opciones pavimentadas y todo terreno que se muestran en diferentes colores en nuestro Trail Tech Voyager Pro. La pequeña flecha resulta hipnótica; sin riesgo de perdernos, tendemos a conducir tanto como podemos. (Además, dado que la temperatura exterior está muy por encima de los 85 grados, a nadie le importa sentarse en un vehículo con aire acondicionado).
Los motores EcoBoost de los dos Rangers consumen combustible tan lentamente como los viejos señores británicos beben té, lo que nos brinda suficiente autonomía para viajar más de 250 millas por día. La potencia entregada por los turbos y la marcha suave proporcionada por las suspensiones de trabajo pesado del FX4 a veces incluso nos empujan a cambiar al modo rally, acelerando a través de la tierra roja como corredores profesionales de WRC. Pero estar aquí en familia en lugar de con un grupo de amigos te recuerda rápidamente que aterrizar se trata más de la distancia recorrida que de la adrenalina, y rápidamente regresamos a un ritmo más razonable. (Incluso si al camión no le importaba ir rápido).
A medida que se pone el sol, es hora de comenzar lo que se convertirá en nuestra rutina diaria: encontrar un lugar para acampar libre para pasar la noche en la tierra de BLM, instalar nuestras tiendas de techo Tepui Explorer Kukenam y Autana y cocinar algunas comidas fáciles pero saludables. Usando dos hieleras de plástico y una estufa de gas, preparamos recetas con suficientes proteínas, carbohidratos y vegetales para llamar a este viaje una experiencia gastronómica. Los kits de cocina para exteriores de GSI nos ayudan a mantener todo organizado para la cena y el desayuno, transformando lo que sería un deber en el ejército en un verdadero placer. Una vez que los platos estén lavados (usando hielo derretido de la hielera en lugar de desperdiciar agua potable), es hora de un juego de cartas o una fotografía nocturna de la Vía Láctea. Hola, modo vacaciones.
Cogiendo resfriado en Colorado
La transición entre Nuevo México y Colorado es algo brutal. La elevación sube a medida que llegamos al Estado Dorado, y con cinco veces más nieve este invierno que en años anteriores, la mayoría de los pasos en las Montañas Rocosas todavía están cerrados como descubrimos de primera mano al intentar pasar Stunner Pass, solo para encontrar una gran mancha de nieve en la cumbre.
Mientras que los dos primeros parches de nieve nos llevan solo unos pocos intentos de pasar, gracias al alto despeje del Ranger FX4s y la ayuda de las alfombrillas de tracción Maxtrax MKII, el último resulta más difícil. Atrapado en la nieve, el primer Ranger se detiene, centrado en lo alto e incapaz de liberarse. Es por eso que viajamos con dos camiones: el segundo Ford puede sacar el desafortunado vehículo suelto en muy poco tiempo.
Como la nieve es profunda, podríamos haber decidido dar la vuelta conduciendo (ilegalmente) fuera del sendero. En cambio, mantenemos viva la actitud terrestre y comenzamos a cavar un camino a través de la nieve con una pala, toda la familia tomando relevos para despejar el camino. (Resulta que aterrizar puede ser un gran ejercicio). Después de unas horas, finalmente llegamos al otro lado justo a tiempo para recibir una tormenta de granizo. Colorado es un lugar difícil.
Afortunadamente, también hay muchas oportunidades dulces en el estado: caminatas y paseos en trineo a lo largo de las cumbres nevadas de Cinnamon Pass, el descubrimiento de antiguas minas de oro, sesiones de remo en los lagos cristalinos y observación de vida silvestre como ciervos, ardillas, zorros, marmotas. , alces y osos.
Retrocediendo en el tiempo en Wyoming
La frontera entre estados trae una vez más un gran cambio geográfico. Las altas montañas todavía están en la distancia, pero ahora conducimos por senderos fáciles en las llanuras. Usando nuestra capacidad de GPS para mostrar la posición del otro vehículo en sus pantallas, los dos camiones se siguen a una distancia segura, para que el segundo pueda evitar ser cegado por el espeso polvo levantado por el primer equipo. Las radios Midland MXT115 MicroMobile de largo alcance facilitan el chat sin importar la distancia, lo que ayuda a evitar colisiones con el tráfico que se avecina, el ganado en los senderos o para solicitar algunas paradas para tomar fotografías.
La vida silvestre es más abundante que nunca; Los berrendos hacen que este campo americano parezca la sabana de África, pero las águilas calvas nos recuerdan que todavía estaban en los EE. UU. a la sensación de libertad que viene con viajar en este océano de hierba. Para la cena, asamos carne a la parrilla como verdaderos vaqueros, luego subimos a nuestras cómodas carpas en el techo para pasar una noche tranquila y reparadora.
Cruzar Wyoming por caminos rurales te hace sentir como si hubieras retrocedido un siglo en el tiempo, con graneros y granjas por todas partes junto con vaqueros reales que todavía se ganan la vida pastoreando ganado. En las aceras de los pequeños pueblos donde paramos para comprar víveres y agua, la gente usa botas de cuero y sombreros Stetson, y los rodeos se organizan para los lugareños, no para los turistas.
El único problema que hay que abordar es como en Nuevo México, Colorado y luego en Montana la molesta presencia de mosquitos. Al atardecer, es como jugar a la ruleta: al azar, pueden estar en ningún lado, o en todas partes a la vez. En este último caso, nos escondemos dentro de las tiendas del techo, la gruesa tela un escudo efectivo contra la furia de estos vampiros.
Rastreo de rocas en Montana
Después de un par de horas recorriendo Idaho, es hora de que los Rangers enfrenten la dura realidad de Montana. El paisaje está dominado por bosques poderosos, donde los troncos caídos se cuentan por miles y los senderos a menudo se dañan por el largo invierno. Si eso no fuera suficiente, la actividad de los osos y los senderos descoloridos brindan muchas oportunidades para que las señales de carretera cerrada aparezcan repentinamente en la siguiente esquina. Incluso cuando los senderos están abiertos, no significa que estén mantenidos; Los baches, los surcos profundos y las rocas seguramente desafiarán a nuestros Ford Rangers. En un momento, cubrimos solo tres millas en cuatro horas.
En estas duras condiciones, el tamaño compacto del Ford Ranger es una verdadera ventaja, ya que le da la capacidad de escabullirse entre los árboles que habría obstaculizado a su hermano mayor F-150. Los cruces de ríos llenos de lodo y surcos profundos son oportunidades para el trabajo en equipo: una persona detrás del volante, transmisión en 4-Low (y el modo de arrastre de rocas configurado a baja velocidad, por lo general); tres observadores con radios de mano para dar direcciones. Al hacer esto, viajamos a través de las condiciones más resbaladizas como profesionales experimentados.
Si estas secciones técnicas son divertidas, la abundancia de baches en las carreteras secundarias hace que los días parezcan más largos. A menudo no terminamos hasta la noche, las luces LED de Baja Design ayudan a los faros delanteros (sorprendentemente buenos) a perforar la oscuridad del bosque en la búsqueda del lugar perfecto para acampar. Sin embargo, los amortiguadores originales brindan un viaje tranquilo; no se escuchan crujidos ni traqueteos dentro de las cabinas. Estaban muy lejos de los carruajes utilizados en el Camino de Oregón.
Bienvenida a Canadá
Llegar a la frontera real es increíble: un poste de aluminio plantado en medio del bosque marca la separación entre los dos países. No hay nadie alrededor; disfrutamos el momento solos justo cuando el sol desaparece detrás de la línea de árboles. No podríamos haber pedido un mejor momento para celebrar el final de este increíble viaje.
Después de 3500 millas, en su mayoría sobre tierra, no solo seguimos la divisoria continental por todo Estados Unidos, sino que estrechamos los lazos entre los miembros de nuestra familia. Pasando todo el verano juntos, ayudándonos mutuamente con la conducción, la navegación, la cocina, la limpieza y más, compartimos una experiencia única en la vida que nos hizo sentir más conectados con nuestro país, así como enganchados al concepto de aterrizando Estados Unidos es un maravilloso lugar de recreo y todavía hay miles de senderos que esperan ser explorados.
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