Lo hiciste: te comprometiste con tu afición a pedalear y te compraste una bicicleta. Ya sea una bicicleta de carretera, una bicicleta de montaña o algo intermedio, es probable que cueste un centavo. Al principio, puede mimarlo, tratarlo como un elemento de exhibición frágil en lugar de algo que se usa para el transporte, montarlo con delicadeza, referirse a él con un pronombre humano. Eso desaparecerá y luego querrás llevarlo a todas partes, incluso al otro lado del país o al extranjero.
No estarás solo. La conducción de grava, un tipo de ciclismo aventurero que se caracteriza por recorrer largas distancias en una combinación de caminos pavimentados y sin pavimentar, está creciendo más rápido que cualquier otro segmento en la industria de las bicicletas. Los equipos de carreras profesionales, en particular Education First, incluso están adoptando calendarios de carreras alternativos que incluyen concursos como Dirty Kanza, una prueba de 200 millas en caminos secundarios accidentados de Kansas.
Montar en grava y andar en bicicleta (una combinación autosuficiente de andar a distancia y acampar similar al mochilero) se prestan para viajar. Pero la distancia no es precursora de la aventura en bicicleta; hacer cualquier viaje largo, ya sea por caminos cubiertos de tierra o pavimento, tiene valor en sí mismo. El único obstáculo: llevar su viaje a su destino final, y hay más de una forma de hacerlo.
Costo de volar con una bicicleta
Muchas aerolíneas como Delta, American Airlines, United y Southwest clasifican las bolsas para bicicletas como equipaje regular, con esas restricciones de tamaño y peso aplicadas, típicamente 50 libras y una longitud combinada más ancho más altura de 62 pulgadas. Si su equipaje no cumple con estos requisitos, podría terminar pagando hasta $200 en cargos.
Otras aerolíneas no ofrecen esa clasificación de equipaje regular (Air France, Lufthansa, Air Canada son algunas) y es posible que tengan políticas que requieran que llame con anticipación para informarles que está volando con una bicicleta. En caso de duda, llame a su aerolínea tan pronto como reserve los boletos para averiguar cuáles son las reglas.
Envía tu bicicleta
Hay una alternativa a facturar tu bicicleta a bordo de un avión: envíala en su lugar. Los costos asociados con este método a menudo pueden ser menores que las tarifas de la aerolínea si no puede cumplir con los requisitos de sus políticas de equipaje facturado y, por lo general, puede salirse con la suya usando el mismo estuche rígido o bolso que llevaría en un avión.
También puede comunicarse con su tienda de bicicletas local y ver si estarían dispuestos a enviar su bicicleta por correo a su destino o a una tienda de bicicletas cercana, lo que podría costarle aproximadamente $ 50, según la tienda. Por un cargo adicional, muchas tiendas desarmarán y empaquetarán su bicicleta en una caja, y una tienda de recepción puede reconstruirla antes de que llegue. Las tiendas de bicicletas siempre tienen cajas por ahí, por lo que también puedes ahorrar dinero comprando una bolsa de esta manera.
Cómo empacar tu bicicleta
Las bolsas para bicicletas vienen en dos tipos: duras o blandas. Los estuches rígidos ofrecen una protección seria, pero son más pesados, por lo que pueden limitar su equipaje si está tratando de mantenerse por debajo del límite de las aerolíneas. Los estuches blandos son más livianos pero no tan protectores. Ambos tipos suelen tener ruedas así como un sistema interno de acolchado y organización para facilitar el embalaje. La bolsa que compre guiará el proceso, pero aquí hay algunas cosas generales que debe recordar:
Desarma tu bicicleta. No del todo, pero dependiendo de la bolsa, es probable que tengas que quitarte los pedales, las ruedas y el manubrio.
Desinfle sus llantas. Consulte con su aerolínea las reglas aquí y deje un poco allí para proteger las llantas. Es posible que también deba desinflar su suspensión.
Retire el desviador trasero. Fíjelo dentro de las vainas (los dos tubos que se extienden hacia atrás desde los pedales hasta el eje trasero) con una brida u otro sujetador.
Envuelve tu cadena. Use un trapo u otra cosa para evitar un desastre aceitoso.
Las mejores bolsas para bicicletas
Mejor estuche rígido: Estuche SciCon Aerotech Evolution X TSA
El estuche rígido SciCons utiliza un compuesto ABS para brindar un alto nivel de protección mientras mantiene un peso bajo (24 libras).
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Estuche rígido asequible: Estuche de viaje para bicicleta de transición de ida y vuelta Thule
El estuche de viaje para bicicleta de transición de ida y vuelta de Thule utiliza una construcción de carga superior. Eso suena inconveniente hasta que ve el soporte para bicicletas incluido, lo que hace que desarmar una bicicleta para empacar (y volver a armar en el destino) sea una tarea mucho más fácil.
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Mejor estuche blando: Db Equipment Savage Bike Bag
La Savage es una bolsa de caparazón blando con una jaula antivuelco incorporada inspirada en los autos de carrera. Está fabricado en aluminio y ofrece protección desde todos los ángulos, así como puntos de anclaje para una serie de correas que se utilizan para mantener la bicicleta estable y en su lugar.
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Estuche blando asequible: Evoc Bike Travel Bag
A menudo catalogada como una de las mejores bolsas blandas para volar con una bicicleta, la bolsa de viaje para bicicleta Evocs es una de las opciones más asequibles, pero aún ofrece almacenamiento compartimentado y un sistema de correas internas y acolchado para mantener su viaje seguro y protegido.
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