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Bienvenido a Más detalles , una serie dedicada a elementos omnipresentes pero pasados por alto ocultos en sus productos favoritos. Esta semana: los pequeños puntos y otras decoraciones en el frente de tus lentes.

Los anteojos, tal como los conocemos hoy, son un invento del siglo XVIII. Un británico llamado Edward Scarlett conceptualizó lo que él llamó "gafas de templo", un par de lentes colocados juntos con alambre y unidos a brazos de metal que se envuelven alrededor de la oreja. Él no fue el primero, argumenta el Colegio de Optometristas. Hablando de hecho, es posible que simplemente haya sido el primero con un presupuesto publicitario. ¿Quién sabe?

A mediados del siglo XX, los fabricantes de anteojos habían pasado del uso de metales y nitrato de celulosa al acetato de celulosa. El material derivado de la pulpa de madera demostró ser más estable que el nitrato de celulosa y más elegante que los metales desnudos. Pero la transición requirió un poco de magia de fabricación. La introducción de las bisagras no ocurrió durante el siglo XX. Las monturas de Scarlett también eran plegables, pero las monturas de acetato requerían herrajes nuevos y visibles para mantener todo en su lugar.

Y ahora volvimos al punto de partida: llegar al fondo de lo que realmente hacen los puntos, las hojas, las flechas, las barras y más allá en la parte frontal de los marcos. Para ser (¿mecánicamente? ¿lingüísticamente?) correctos, son remaches o un diseño decorativo destinado a ser un ancla (o simplemente una cubierta) para los remaches del otro lado. ¿Por qué no son todos iguales? Dependiendo del tipo de bisagra de sus anteojos, resorte, oculto o sin bisagras, puede haber diferentes remaches.

Mosquito

Para cualquier persona con un poco de conocimiento mecánico, esto podría ser de sentido común. Sin embargo, la mayoría de los anteojos de acetato o de marco completo, que son del tipo que requieren remaches frontales, se ensamblan con bisagras de espiga. Estos apilan juntas las partes de apilamiento se llaman charniers y se aseguran con un tornillo vertical. Luego, los remaches se introducen en el marco siguiendo la formación de las espigas.

Los remaches se agrupan en conjuntos de dos o tres, lo que significa ocho o 12 en total. Hay un juego a cada lado del marco cuando los miras de frente y juegos en ambos brazos, junto a las sienes. Algunos vienen con barras juntas, por lo que verá una placa rectangular en el frente en lugar de puntos desconectados. Otros utilizan la tradición como una forma de decoración. Sus marcos no necesitan remaches en absoluto, pero su presencia implica un acabado pulido y una artesanía de calidad, incluso si son el par más barato que podría encontrar. Las monturas de acetato con remaches pronunciados tienen algo de elaborado. Y los que tienen "firmas", las hojas de palma en el marco de Nápoles de Garrett Leight, los diamantes en el marco de Lemtosh de Moscot ofrecen una forma de señalar que está usando marcos de una marca favorable. Compre pares por algunos a continuación.