Los platos de ducha de piedra natural son una opción perfecta para aquellos que buscan añadir elegancia y resistencia a su baño. La piedra natural es un material duradero y de alta calidad que aporta un toque de lujo a cualquier espacio. Además, esta opción es altamente funcional, ya que los platos de ducha de piedra natural son fáciles de limpiar y mantener. En este post, te contaremos todo lo que necesitas saber sobre los platos de ducha de piedra natural, desde los diferentes tipos de piedra disponibles hasta los precios y ventajas de elegir esta opción para tu baño.
¿Cuáles son los beneficios de tener un plato de ducha de piedra?
Además de su resistencia a la corrosión, un plato de ducha de piedra ofrece una serie de beneficios que lo convierten en una opción popular para los baños. Uno de los principales beneficios es su durabilidad. La piedra es un material robusto y resistente que puede soportar el uso diario y el paso del tiempo sin sufrir daños significativos. Esto significa que no tendrás que preocuparte por reemplazar o reparar tu plato de ducha con tanta frecuencia como lo harías con otros materiales.
Otro beneficio de tener un plato de ducha de piedra es su belleza estética. La piedra natural tiene una apariencia única y elegante que puede mejorar el aspecto general de tu baño. Además, la variedad de colores y texturas disponibles en los platos de ducha de piedra te permite personalizar el diseño de tu baño según tus preferencias.
En cuanto a la limpieza, los platos de ducha de piedra son fáciles de mantener. La superficie lisa y no porosa de la piedra evita la acumulación de suciedad y moho, lo que facilita su limpieza. Para mantener tu plato de ducha de piedra en óptimas condiciones, simplemente debes eliminar los residuos después de cada uso y realizar una limpieza más profunda de vez en cuando, utilizando productos no abrasivos.
¿Cuál es el mejor material para un plato de ducha?
Para determinar cuál es el mejor material para un plato de ducha, es importante considerar varios factores, como la durabilidad, la resistencia al desgaste y los productos químicos, así como la estética y la facilidad de limpieza. Algunos de los materiales más populares y recomendados son:
1. Piedra natural: Los platos de ducha fabricados con piedra natural, como el mármol o el granito, ofrecen una apariencia elegante y duradera. Son altamente resistentes al desgaste y a los productos químicos, lo que los hace ideales para un uso intensivo. Sin embargo, suelen ser más costosos que otros materiales.
2. Resinas o cargas minerales: Los platos de ducha fabricados con resinas o cargas minerales, como el Silestone o el Porcelanosa, ofrecen una gran resistencia y durabilidad. Estos materiales son fáciles de limpiar y tienen una amplia variedad de diseños y colores para elegir. Además, son antideslizantes y suaves al tacto, lo que proporciona una experiencia de ducha más cómoda.
3. Solid surface: El solid surface es un material compuesto de resinas y minerales, como el Corian. Es altamente resistente a los impactos y a los productos químicos, además de ser muy fácil de limpiar. Los platos de ducha de solid surface están disponibles en una amplia gama de colores y diseños, lo que permite una personalización total del espacio de ducha.
4. Cerámica: Los platos de ducha de cerámica son una opción clásica y duradera. Son resistentes a los golpes y a los productos químicos, y ofrecen una gran variedad de diseños y acabados. Sin embargo, pueden ser más resbaladizos que otros materiales, por lo que es importante elegir un modelo con una superficie antideslizante.
5. Materiales acrílicos: Los platos de ducha de acrílico son una opción económica y ligera. Son fáciles de instalar y tienen una buena resistencia a los golpes. Sin embargo, pueden ser más sensibles a los arañazos y a los productos químicos agresivos, por lo que requieren un cuidado especial para mantener su apariencia.
¿Cuáles son los principales beneficios de un plato de piedra?
Además de su resistencia a los golpes y su superficie antideslizante, los platos de piedra ofrecen otros beneficios que los hacen una excelente opción para tu ducha. Uno de ellos es su durabilidad y resistencia a la corrosión. A diferencia de otros materiales, los platos de piedra no se manchan fácilmente y su belleza se mantiene intacta a lo largo del tiempo.
Otro aspecto a destacar es su ligereza, lo que facilita su instalación. Al ser más livianos que los platos cerámicos, son más fáciles de manejar y colocar en la ducha. Esto es especialmente útil si estás realizando una renovación en tu baño y quieres hacerlo tú mismo.
En cuanto a la limpieza, los platos de piedra son muy fáciles de mantener. Basta con eliminar los residuos después de su uso para mantenerlos en buen estado. Además, su superficie lisa evita que la suciedad se adhiera con facilidad, lo que facilita su limpieza regular.
¿Cómo limpiar el suelo de piedra de la ducha?
Limpiar el suelo de piedra de la ducha es importante para mantenerlo en buen estado y evitar la acumulación de suciedad y manchas. Una forma efectiva de limpiar este tipo de superficies es utilizando vinagre blanco de limpieza. Este producto es económico y seguro de usar, ya que no contiene productos químicos agresivos que puedan dañar la piedra.
Para limpiar el suelo de piedra de la ducha con vinagre blanco, puedes preparar una mezcla de partes iguales de vinagre y agua. Aplica esta solución sobre el suelo de piedra y déjala actuar durante unos minutos. Luego, frota la superficie con un cepillo de cerdas suaves o una esponja, prestando especial atención a las áreas más sucias o manchadas. Finalmente, enjuaga con agua abundante para eliminar cualquier residuo de vinagre.
¿Cuál es mejor, un plato de ducha de obra o de resina?
El plato de ducha de obra es una opción muy recomendable a la hora de elegir un plato de ducha para nuestro baño. A diferencia de los platos de ducha de resina, los platos de ducha de obra se adaptan perfectamente a cualquier tipo de baño y necesidad. Esto se debe a que se pueden personalizar en cuanto a tamaño, forma y acabados, lo que permite tener un plato de ducha a medida que se ajuste a nuestras preferencias y necesidades específicas.
Además, los platos de ducha de obra presentan una mejor estética, ya que se integran de forma más armoniosa en el conjunto del baño. Al estar construidos con materiales como azulejos o cerámica, se pueden diseñar combinaciones de colores y texturas que encajen con el estilo decorativo del baño. Esto no es posible con los platos de ducha de resina, que suelen tener un aspecto más uniforme y menos personalizable.
En cuanto a la durabilidad, los platos de ducha de obra son más resistentes y duraderos que los de resina. La construcción en obra permite que el plato de ducha sea más sólido y resistente a golpes y desgaste, lo que garantiza una mayor vida útil. Además, al ser totalmente impermeables, evitan la filtración de agua y la aparición de humedades en el suelo del baño, lo que contribuye a su conservación a largo plazo.